“Lo importante no es estar ocupado; las hormigas lo están. Lo importante es preguntarse en qué estamos ocupados.”
THOREAU
Trabajo: Ponte en Foco
Estamos afectados por una epidemia de falta de atención y dispersión.
La rutina diaria se ha vuelto frenética. Vivimos rodeados de estímulos constantes y que aparecen de forma simultánea a nuestro alrededor. Ya sea por nuestro estilo de vida, el móvil u otras distracciones, el caso es que las personas tienen cada vez más dificultades para concentrarse.
Se dice que pasamos la mayoría del tiempo en un estado mental conocido como atención parcial continua.
Quizás hayas advertido que te es difícil permanecer concentrado en una tarea o en una conversación. Que has tenido que releer un documento o que una tarea te ha llevado más tiempo del que habías imaginando. Y descubres que, por más atento que quieras estar, tus pensamientos van de un lado a otro. Viajando por el pasado o por el futuro, principalmente.
Y que te distraes fácilmente con cualquier cosa. Por ejemplo, revisar tu teléfono constantemente, a ver si te vas a perder algo. ¿Te suena? Esto puede distraer tu mente y devorar tu día sin que apenas te des cuenta.
Que no te quepa la menor duda: cuando estás distraído, tu productividad y desempeño se reducen notoriamente.
Por otro lado está la multitarea.
Hoy en día tendemos a estar todos ocupados, sobrecargados y quizás estresados. Es parte de nuestra identidad. Si estamos ocupados somos importantes. Si estamos estresados, es porque estamos comprometidos y trabajando duro. Si no estamos ocupados y estresados, no nos estamos esforzando lo suficiente.
La neurociencia está demostrándonos las extraordinarias limitaciones de la mente para la multitarea. Como si estuviéramos construidos para hacer una sola cosa a la vez.
La multitarea consiste en realizar dos o más tareas al mismo tiempo o alternar entre tareas. Nadie puede realmente realizar múltiples tareas. En realidad, su cerebro está cambiando locamente de una cosa a otra, a menudo perdiendo datos en el proceso.
Si la multitarea es tan ineficiente, ¿por qué la gente todavía lo hace?
La razón fue descubierta en un estudio realizado en la Universidad Estatal de Ohio. Se monitorizaba a los estudiantes y se descubrió que, el realizar múltiples tareas les hacía sentir más productivos, aunque en realidad eran improductivos.
Además, otros estudios encontraron que la multitarea produce adicción. Cuanto más haces multitarea, más adicto te vuelves.
Existe una clara alternativa: tener muchas actividades y ser altamente efectivo y productivo, pero mantener la claridad mental y la calma.
No rendirse a la adicción a la acción y la multitarea. Aprender a enfocarnos en las tareas y objetivos realmente importantes en la vida y en el trabajo.
LA PRÁCTICA
El truco es disminuir la velocidad momentáneamente. Dejar de hacer cosas. De esta forma, permitimos que el cerebro deje de lado la necesidad inmediata de dopamina y podemos enfocarnos y elegir nuestras acciones con claridad y libertad.
Puedes adoptar un enfoque sistemático para reducir la velocidad mediante la implementación de “brechas de conciencia” en tu trabajo. Son 45 segundos de descanso a cada hora. Los descansos de conciencia son como un botón de reinicio. Te ayuda a reajustar tu mente, a salir del piloto automático y a aumentar tu enfoque.
Configura un temporizador para notificarte que es hora de tomarse un momento.
Cuando recibas la notificación, detén lo que estás haciendo, deja de lado los pensamientos y dirige tu atención a tu respiración.
En el primer ciclo de respiración, relaja tu cuerpo y mente. En el segundo ciclo, enfoca tu atención. En el tercero, pregúntate a ti mismo: "¿Qué estoy haciendo ahora mismo: perseguir ratones o perseguir una presa más grande? ¿Es superfluo o es prioritario? ¿Me aleja o me aproxima a mis objetivos y metas?
Y aprovecha para tomar un mini-descanso.
Por cada 50 minutos de trabajo, se recomienda tomar un descanso de 5 a 10 minutos para darle un descanso a tu cerebro, y, en última instancia, aumentar la productividad.
Un descanso puede ser tan fácil como ponerte de pie (si estás sentado), moverte en la medida de tus posibilidades, hacer algunos estiramientos breves o tomar un trago de agua.
LA REFLEXIÓN
Existe una gran diferencia entre una tener una agenda llena y disfrutar de una vida plena. Estar demasiado ocupado te aleja de tus prioridades.
En cambio, estar en foco cada día te servirá para emplear tu tiempo en lo verdaderamente importante.
Con la práctica de mindfulness aprendes a estar enfocado en una sola tarea a la vez. Eso a su vez redunda en una mejora de la productividad y la eficacia.
Aumenta tu capacidad de concentrarte y de permanecer enfocado.
Cuando estás en calma y en flujo con la tarea, no sólo rindes más sino que también tienes ideas más creativas
También mejora la toma de decisiones. Si puedes permanecer enfocado y en calma tu capacidad de tomar la decisión correcta aumenta exponencialmente.
Con esta práctica reducirás los niveles de estrés laboral y las enfermedades asociadas a estar estresados
Conseguir el 100% del control de nuestra mente es prácticamente imposible, pero si visitas diariamente tu propio gimnasio mental, y entrenas el músculo de la atención, podrás, sin duda, mejorar tu concentración.